Los precios del oro superaron el viernes por primera vez la cota de los u$s2.600, prolongando una subida impulsada por las apuestas a nuevos recortes de las tasas de interés en Estados Unidos y el aumento de la tensión en Oriente Medio.
El oro al contado subió un 0,7%, a u$s2.605,50 la onza, mientras que los futuros estadounidense avanzaban un 0,6%, a u$s2.630,30. El repunte del lingote se vio impulsado después de que la Reserva Federal inició el miércoles un agresivo ciclo de flexibilización con una reducción de medio punto porcentual, lo que aumentó el atractivo del metal precioso, que no paga intereses.
Los precios del activo de refugio han subido un 26% en 2024, la mayor alza anual desde 2010, ya que los inversores también trataron de cubrirse de las incertidumbres provocadas por los conflictos en Oriente Medio y otros países.
El repunte récord del oro podría estar a punto de sufrir una corrección, según analistas
«Claramente, todavía hay cierta actividad compradora asociada a la decisión de la Reserva Federal de iniciar su ciclo de relajación con un gran recorte», dijo Daniel Ghali, estratega de materias primas de TD Securities.
Sin embargo, «la fuente de esta actividad compradora sigue fuera de nuestro radar«, dado que las entradas en ETF (fondos cotizados en bolsa) son relativamente marginales y los compradores asiáticos siguen al margen, todos ellas señales de «posicionamiento extremo», añadió Ghali.
El repunte récord ha mermado la demanda minorista de los principales consumidores, China e India.
Commerzbank señaló en una nota que «no debería durar para siempre», citando las expectativas de recortes de tasas de sólo 25 puntos básicos cada uno en las dos próximas reuniones de la Reserva Federal.
Los recortes de tasas impulsan la demanda de oro
La Reserva Federal inició su ciclo de flexibilización con un recorte sustancial de medio punto porcentual en la tasa de interés el miércoles. Las proyecciones de los responsables de las políticas indican que podría haber otra reducción de medio punto antes de fin de año, seguida de un recorte de un punto completo el próximo año y una disminución adicional de medio punto en 2026. Estas tasas de interés más bajas hacen que el oro sea una opción más atractiva, ya que no genera intereses, lo que reduce el costo de oportunidad para los inversores.
Y es que ante la creciente incertidumbre global, incluyendo tensiones geopolíticas como la guerra en Ucrania y las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos, los inversores están buscando cada vez más el oro como un activo de refugio seguro.
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