En la Bolsa de Nueva York, el índice Dow Jones de Industriales subió 0,1% a 42.063,36 puntos y marcó un nuevo récord, pero el S&P500 perdió un 0,2% a 5.702,55 puntos y el Nasdaq Composite se depreció un 0,4% hasta los 17.948,32 puntos. En la semana el Dow avanzó más de 2%.
En paralelo, el índice dólar, que mide la cotización del billete verde frente a las principales divisas, avanzó ligeramente a 100,75, justo por sobre el mínimo de un año. La moneda norteamericana alcanzó los 144,50 yenes, su nivel más alto desde inicio de septiembre. El euro también se fortaleció ante la moneda japonesa, sumando un 0,9%, a 160,59 yenes.
Por su parte, el dólar se estabilizó tras las pérdidas sufridas previamente en la semana después de que la Fed recortó las tasas en 50 puntos básicos y aseguró a los inversores que se trataba de una medida para salvaguardar la solidez de la economía, y no de una respuesta de emergencia a la reciente debilidad del mercado laboral.
En el mercado europeo, las acciones se hundieron 1,4% desde máximos de dos semanas, con los papeles de los fabricantes de automóviles descendiendo 3,6% y Mercedes-Benz derrumbándose 6,8% después de anunciar un recorte de su objetivo de margen de beneficios para todo el año por segunda vez en menos de dos meses. Otros rivales del sector, como Volkswagen y la francesa Forvia cayeron un 3,4% y un 8%, respectivamente. Aun así, la renta variable en el «viejo continente» sumó su segunda semana de ganancias al hilo.
En China, el banco central mantuvo las tasas de interés de referencia, contra las expectativas de una bajada. Los índices chinos subieron un 0,2%, pero se mantuvieron cerca del mínimo de siete meses alcanzado a principios de semana.
El yuan en los mercados continentales se fortaleció hasta alcanzar su nivel más alto en casi 16 meses tras la sorpresiva medida del Banco Popular de China, lo que llevó a la intervención de los bancos estatales para evitar que se aprecie demasiado rápido.
Por su parte, el oro alcanzó un nuevo máximo histórico y superó los u$s2.600 por primera vez, mientras que los precios del petróleo bajó este viernes pero en la semana acumuló una ganancia de
China mantiene estables las tasas de interés
China mantuvo inesperadamente las tasas de interés de referencia sin cambios en la fijación mensual del viernes, contra las expectativas del mercado que estaban preparadas para un movimiento después de que la Reserva Federal realizó un recorte exagerado de los tipos de interés previamente esta semana.
Sin embargo, los observadores del mercado creen ampliamente que se desplegarán nuevos estímulos para apuntalar una economía en crisis, ya que la relajación de la Reserva Federal ofrece a Pekín margen de maniobra para flexibilizar la política monetaria sin perjudicar indebidamente al yuan.
La tasa preferente de los préstamos a un año (LPR) se mantuvo en el 3,35%, mientras que el LPR a cinco años se mantuvo en el 3,85%.
En una encuesta de Reuters realizada esta semana a 39 participantes en el mercado, 27, es decir, el 69%, de todos los encuestados esperaban que se recortaran ambas tasas.
«Es probable que el recorte de tasas se incluya en un paquete de políticas más amplio, que está siendo revisado por los funcionarios de alto rango», dijo Xing Zhaopeng, estratega senior de China en ANZ, refiriéndose a los responsables chinos a cargo de la política monetaria.
«Los datos económicos actuales y las expectativas apoyan un recorte de las tasas. Además, la rebaja de los tipos de los préstamos hipotecarios existentes también requiere nuevas reducciones de la LPR a 5 años, lo que puede provocar un descenso único y significativo de la LPR en el cuarto trimestre».
Una serie de datos económicos de agosto, incluidos los indicadores de actividad y préstamos, sorprendieron a la baja y aumentaron la urgencia de desplegar más medidas de estímulo para apuntalar la segunda mayor economía del mundo, según los observadores del mercado.
Los analistas y asesores políticos esperan que los responsables chinos a cargo de la política monetaria intensifiquen las medidas para, al menos, ayudar a la economía a cumplir el objetivo de crecimiento para 2024, cada vez más difícil.
El debilitamiento de la actividad económica china ha llevado a las agencias de valores internacionales a rebajar sus previsiones de crecimiento para 2024 por debajo del objetivo oficial del Gobierno, en torno al 5%.
El presidente Xi Jinping instó la semana pasada a las autoridades a esforzarse por alcanzar los objetivos anuales de desarrollo económico y social del país, informaron los medios estatales, en medio de expectativas de que se necesitan más medidas para apuntalar una recuperación económica que flaquea.
«Hay muchas probabilidades de que el Banco Popular de China (PBOC) baje las tasas y los bancos bajen pronto los tipos de interés a largo plazo», dijeron los analistas de Commerzbank en una nota.
«El escaso crecimiento exige una relajación de la política monetaria, y los recortes de tasas de la Fed dan margen al PBOC para recortar».
La divergencia de la política monetaria con otras grandes economías, en particular Estados Unidos, y el debilitamiento del yuan chino han sido las principales restricciones que han limitado los esfuerzos de Pekín por relajar su política en los dos últimos años.
Sin embargo, el recorte de 50 puntos básicos efectuado el miércoles por el Banco Central de Estados Unidos, que dio inicio a una serie anticipada de rebajas de las tasas de interés, ha liberado algunas de las palancas políticas de China, según los analistas.
La mayoría de los préstamos nuevos y pendientes en China se basan en la tasa a un año, mientras que el tipo a cinco años influye en el precio de las hipotecas.
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