El clima determina el modo de conducir. Sin importar a qué hora se prefiera viajar, se debe supervisar el estado de los frenos, ya que en temporada de lluvia garantizan la integridad. Cada vez que una persona se traslada en la ruta tiene que asegurarse que el auto se encuentra listo para cualquier emergencia. Y es que cuando se desatan tormentas, el agua, las inundaciones y los charcos juegan en contra de los conductores. Por eso, en el Universal dieron a conocer cómo frenar de manera correcta con ayuda de unos consejos sencillos de seguridad.

Cabe destacar que la lluvia repercute en el agarre y la fricción de los neumáticos. El agua, mezclada con los aceites que se encuentran en la ruta, aumenta las probabilidades de sufrir un derrape, es decir, el deslizamiento involuntario del auto a causa de la acumulación de líquido debajo de las llantas. Ahora bien, de acuerdo con Road House, taller de mantenimiento especializado en frenos, hay varias maneras de frenar durante estas condiciones climáticas. En términos de seguridad, lo mejor son los frenos ABS porque garantizan el control del volante al detener el auto abruptamente.

Sin embargo, no todos los vehículos cuentan con el anterior sistema. ¿Cómo reaccionar ante una emergencia? Los expertos recomiendan pisar el freno y embrague al mismo tiempo para que el motor y la caja de cambios dejen de impulsar el auto.

Una segunda opción es frenar con el motor. Según explica Ford, “esta acción busca bajar la velocidad del vehículo utilizando poco o nada el pedal del freno y consiste en ir bajando las marchas gradualmente desde quinta velocidad, a cuarta y así sucesivamente, hasta llegar a la segunda marcha”.

Uno por uno, los consejos para manejar cuando llueve

De todas formas, para manejar bajo la lluvia hay que redoblar precauciones. No solo porque ayuda a proteger el vehículo, sino que previene accidentes con los otros que se encuentran al alrededor. Algunas acciones que se pueden implementar son:

• Conducir despacio, ya que la lluvia limita el campo de visión. Bajar la velocidad permite controlar el volante y da tiempo de reaccionar a una emergencia.
• Guardar distancia entre el auto y el de enfrente. Si ocurre un problema con los frenos, habrá el espacio suficiente para no chocar.
• Mantener la vista en el camino y no utilizar el teléfono. Cualquier distractor podría exponer al conductor a sufrir un accidente en la ruta.
• Los baches son el peor enemigo. Con la lluvia se llenan de agua y es difícil verlos, pero se los puede identificar siguiendo al auto que va delante. Hay que recordar que caer en un bache ocasiona que el neumático se reviente o deforma el rin.