Pedro Sánchez volvió a cargar contra Javier Milei, a quien cuestionó con una consigna peronista. «O estamos con la justicia social o estamos con Milei», dijo el presidente del gobierno de España, que así se mete otra vez en el fuerte cruce entre ambos líderes que escaló a un conflicto diplomático con el retiro de la embajadora española en Buenos Aires.
Sánchez mencionó al libertario en una reunión del PSOE, en plena campaña rumbo a las elecciones europeas del 9 de junio. «En esta ocasión está bastante claro. O estamos con la justicia social o estamos con Milei», fue su arremetida en el inicio de un pasaje enérgico de su discurso, con cita de la consigna del peronismo, al que llamó a votar antes del balotaje Massa-Milei. Una proclama que, además, despierta el rechazo frontal del mandatario argentino.
Sánchez siguió con menciones a Israel (justo después de que España reconociera a Palestina como país) y a la presidenta de la comunidad de Madrid, entre otras figuras políticas. «O estamos con la paz o con Netanyahu. O estamos con el compromiso climático o estamos con Aznar. Con la convivencia o estamos con Ayuso [Isabel Díaz-Ayuso]. Con el juego limpio o con Feijóo [Alberto Núñez Feijóo]», dijo Sánchez.
«Quien quiera justicia social, convivencia, paz y juego limpio tiene que votar al Partido Socialista el próximo 9 de junio. Y no votar al Partido Popular ni a la internacional ultraderechista», cerró ese fragmento.
Pedro Sánchez pronunció el discurso en su primera reunión de las elecciones europeas en Euskadi junto a la cabeza de lista y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, en la localidad vizcaína de Barakaldo.
El presidente del gobierno español es una figura cercana a Alberto Fernández, con quien se reunió en los últimos meses en Madrid. Incluso llamó a votar a Sergio Massa en el balotaje de las presidenciales argentinas, comicios en los que finalmente se impuso Javier Milei.
Después de los primeros cruces entre ambos presidentes, el conflicto mayor se despertó cuando Milei se refirió a la esposa de Sánchez, Begoña Gómez, como una «mujer corrupta», al participar de un festival organizado por el partido de ultraderecha Vox, rival del PSOE en los comicios europeos. Gómez está siendo investigada por la presunta comisión de delitos de corrupción.
Pocas horas más tarde, España llamó a consultas a la embajadora en Buenos Aires, María Jesús Alonso Jiménez, y exigió una rectificación a Milei. La reacción del gobierno argentino no fue la esperada por Sánchez: Guillermo Francos dijo que podría «esperar tranquilo» el mensaje conciliador, mientras que Manuel Adorni dijo que Milei «no tiene por qué pedir disculpas».
«De hecho seríamos muy gustosos que efectivamente el gobierno español le pida perdón al Presidente por todo el maltrato, destrato e insultos que ha recibido en los últimos 15 días», añadió el vocero presidencial.
La escalada llevó a que Sánchez directamente retirara a la embajadora, una decisión que Milei calificó de «disparate». Además, el libertario le recomendó a su par español que «se busque un buen abogado para su esposa». Y concluyó: «España está haciendo una papelón internacional por culpa de un delirante que se cree dueño del Estado».
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