Con un concurso de crónicas y perfiles periodísticos, La Agenda Revista festeja su primer década en la Web. Creada a finales de 2014 por iniciativa del entonces coordinador general del Sistema de Medios Públicos del gobierno porteño, Pablo Avelluto, y de Hernán Iglesias Illa, actual director del semanario digital Seúl, La Agenda convocó a escritores y cronistas reconocidos o en “vías de reconocimiento”. Los primeros editores fueron el periodista Diego Papic (actualmente integra el equipo de Seúl) y el escritor y periodista Pablo Perantuono, que desde 2015 dirige la publicación con la periodista Astrid Pikielny, colaboradora de LA NACION.
Escritores, críticos y periodistas como Alan Pauls, Juan José Becerra, Camila Sosa Villada, Gabriela Cabezón Cámara, Quintín, Rosario Bléfari, Natalia Moret, Patricio Pron, Camila Fabbri, Martín Felipe Castagnet, Ana Navajas, Gustavo Álvarez Núñez, Martín Kohan, Fernanda Nicolini, Luciano Lamberti, Osvaldo Aguirre, Alejandro Caravario y Gonzalo Léon colaboraron y colaboran en La Agenda que cuenta con una sección de archivo.
“Los que hacemos La Agenda sentimos un cariño muy especial por la revista, porque además de hacerla con libertad tiene un componente artesanal que la hace estimulante y entrañable”, dice Perantuono a LA NACION.
“Comenzamos a pensar y elaborar una revista moderna y plural que intentara reflejar el pulso cultural de la ciudad, que conservara el respeto por los modos de las viejas publicaciones, pero que incorporara el lenguaje y la mirada de las nuevas -recuerda Perantuono-. Sus marcas de origen fueron una fuerte presencia del uso de la primera persona, legado de los blogs, y cierto desenfado en el tratamiento de los temas”.
Con el triunfo de Mauricio Macri en las elecciones presidenciales, Iglesias Illa, que dirigía La Agenda, y Avelluto pasaron a integrar el elenco de funcionarios del Gobierno. “En ese entonces, también era editora Tamara Tenenbaum, que permaneció en el staff por tres años más -acota-. En la actualidad, los otros editores son Mauro Libertella, que escribe en la revista desde el principio, Julieta Habif y Jorge Luis Fernández”.
“Desde su nacimiento intentamos que La Agenda evolucionara y que no perdiera contacto con la realidad cultural y social, lo que derivó en que permanentemente estuviésemos pensando en nuevas secciones o iniciativas -cuenta el autor de Teoría del derrape-. Algunos hitos fueron el abordaje, desde un comienzo, de la agenda feminista, la incorporación de ‘historias orales’, es decir, el relato de un episodio histórico a través de las voces de los protagonistas, o la confección de una encuesta nacional, una especie de memoria y balance sobre la actualidad de la literatura argentina, con la participación de más de setenta escritores. Lo que se mantuvo inalterable es el respeto por la calidad narrativa, amparada en la presencia de firmas de prestigio, y la pluralidad de sus contenidos”.
La revista está dirigida a lectores interesados en la actualidad cultural. “Es un público atento, que se refleja en el tiempo de lectura promedio de nuestros textos, cercano a los dos minutos por artículo -destaca-. Desde el comienzo, la respuesta de la audiencia fue de aceptación y de apoyo y el crecimiento de nuestra métricas así lo reflejan”.
La Agenda depende de la Secretaría de Comunicación del gobierno porteño. “Como ocurre con casi todos los medios, y siendo además una revista pública pero también plural y libre, La Agenda parece estar bajo cierto escrutinio de algunos sectores en relación con sus contenidos, intuyendo intenciones detrás de algunos de ellos -afirma el director-. Considero que es una especie de oasis dentro del panorama cultural local, un espacio en el que cada día se puede encontrar un contenido y una mirada sobre el mundo cultural que nos rodea”. Las notas son elegidas por el staff.
Perantuono opina que el panorama actual del periodismo es complejo. “Está en permanente tensión, producto del clima de época, los cambios en los consumos y la aparición de nuevas tecnologías. Las transformaciones han sido de una profundidad extraordinaria y acelerada, y ese proceso pareciera seguir en expansión, habida cuenta de la llegada de la inteligencia artificial, por caso. Tiendo a pensar que el periodismo de calidad, el riguroso y sobre todo el bien escrito, es irremplazable para cualquier comunidad”, concluye.
Primer concurso de crónicas y perfiles
A mediados de junio, La Agenda Revista lanzó el primer concurso de no ficción para las categorías de crónicas y perfiles. Hasta el 15 de agosto, pueden concursar residentes en el país, mayores de dieciocho años.
Los organizadores detallan que una crónica es un texto de no ficción donde se abordan y se relatan con rigor hechos políticos, sociales, deportivos, culturales o de diversa índole. Tiene un carácter narrativo y debe contar con el testimonio de fuentes o de personas que participaron del suceso abordado. Un perfil, en cambio, es un texto sobre una persona real, generalmente del ámbito público, en el que se reconstruye su vida, sus particularidades, su incidencia en el presente o en la historia. Puede tener testimonios de otras personas que lo conocieron.
Los textos deben ser inéditos y originales, con una extensión de 15.000 a 40.000 caracteres con espacios, y tienen que ser presentados con seudónimo. El jurado está integrado por tres autores y periodistas prestigiosos: Hinde Pomeraniec, Juan José Becerra y Santiago Llach.
Los trabajos ganadores se anunciarán en noviembre. El ganador del primer premio recibirá un millón de pesos y los otros dos finalistas se llevarán $ 250.000 cada uno. La entrega de premios se hará en el Centro Cultural Recoleta.
Más información sobre el certamen en este enlace.
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