Máximo Kirchner dijo que el presidente Javier Milei tiene más roces con otros líderes políticos internacionales que lo habitual para un mandatario, y justificó que en el caso de lo ocurrido con España Pedro Sánchez tiene razón en sentirse molesto tras las acusaciones que el mandatario argentino hizo a la esposa de su par español.
«Muchas veces puede haber roces entre jefes de Estado. En el caso de Milei son mucho más habituales. Fueron con (el presidente de Colombia Gustavo) Petro, con (el mexicano Andrés Manuel) López Obrador, con (el presidente de Brasil Luiz Inácio) Lula (da Silva)», respondió el diputado de Unión por la Patria a una de las preguntas que le formularon en una entrevista que publicó este lunes el diario español El País.
Si bien puntualizó esto perfil del jefe del Ejecutivo,- hizo la salvedad de que Milei «no deja de ser el presidente de mi país, aunque no coincida en nada o en casi nada» con él.
Y reconoció que el incidente que fue la piedra que desató el roce diplomático con Madrid fue un exceso por parte de uno de los funcionarios de Sánchez: «Que el ministro de Transporte de España diga que (Milei) consume sustancias no es el mejor camino para tener mejores relaciones«.
Pero si bien aclaró que «hay muchas más coincidencias de una parte del PSOE con Milei con respecto al FMI que con uno», aceptó que Sánchez tiene motivos para sentirse destratado: «Entiendo que esté molesto el presidente».
«Quizá si su postura durante el debate del acuerdo con el FMI hubiera sido más proactiva en entender la posición argentina Milei no hubiese llegado a la presidencia», agregó, recriminándole a Sánchez el accionar del Gobierno español durante las negociaciones entre Argentina y el organismo multilateral de crédito.
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