Los piqueteros reclaman comida en los súper y en el ministerio de Pettovello que prometió «recibir a los que tienen hambre, pero no a los referentes»

Las organizaciones sociales nucleadas en la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) y afines al peronismo presionan al Gobierno por la falta de alimentos en comedores populares. El Ejecutivo pisó las partidas para alimentos y anuncia auditorias a los comedores administrados por los movimientos sociales.

El Movimiento Evita, Barrios de Pie y el MTE, entre otras organizaciones, se movilizaron desde temprano a un centenar de cadenas de super e hipermercados para solicitar donaciones de mercadería.

Alrededor de tres mil manifestantes, entre los que se destacaba el flamante consejo directivo de la UTEP, se apersonaron en Casa Patria Grande Néstor Kirchner, en Pellegrini y Juncal, donde la ministra de Capital Humano, a cargo de los programas de acción social, tiene su despacho principal.

Al llegar a sus oficinas, después de la reunión de Gabinete en Casa Rosada, Pettovello se cruzó con algunos manifestantes. «Tiene hambre la gente, que venga. Voy a atender uno por uno a la gente que tiene hambre, pero no a los referentes. ¿Tiene hambre la gente? Voy a atender uno por uno a la gente que tiene hambre, no a los referentes. Vengan de a uno que les voy a anotar el DNI, el nombre, de dónde son y van a recibir ayuda individualmente”, dijo. Nadie se acercó. Los dirigentes sociales dejaron finalmente un petitorio finalmente para la superministra de Milei. Las imágenes de su intercambio con los manifestantes no tardaron en viralizarse.

La ministra se sentó en una mesa en el patio delantero de la Casa Néstor Kirchner que sirve de cochera con mesa, y un colaborador que escribía en una planilla, pero ningún manifestante ingresó para exponer su caso particular.

Del otro lado de la reja había una decena de cocineras de los comedores populares que llevaron sus ollas hasta las oficinas ministeriales en Retiro con pancartas alusivas. «El hambre no espera» y «No al ajuste en las mesas«, decían. La mayoría de los manifestantes aguardó sobre la vereda, algunos pocos se pararon sobre la calle. El momento más tenso fue cuando algunos lograron abrir el portón. La Policía Federal reprimió y desalojó el perímetro con gases.

Fuentes de las empresas de supermercados confiaron a Clarín que pondrían al tanto a las autoridades del Ejecutivo. Desde las organizaciones, en cambio, blanquearon que varias cadenas ya se comprometieron a donar alimentos a través de sus programas de responsabilidad social empresaria. «No hubo ningún problema«, señalaron fuentes de una de las cadenas más importantes del país, aunque negaron cualquier compromiso con los movimientos sociales. La policía bonaerense tuvo que intervenir en San Martín para que más de un centenar de manifestantes se retirara de un Coto, pero fuentes del municipio y de las organizaciones minimizaron el cruce.

Por la tarde, pequeñas delegaciones de las organizaciones sociales del peronismo marcharán al Congreso para protestar contra le ley ómnibus que impulsa el oficialismo. El miércoles se habían movilizado los piqueteros de izquierda.

La UTEP y los movimientos sociales que participaron de la marcha convocada por la CGT discutirán desde el viernes los pasos a seguir después de que el Gobierno decidiera discontinuar el envío de alimentos secos a los comedores. Para el martes preparan acciones para reclamar por la garrafa social que en la Ciudad cuesta $6 mil pero en las barriadas puede triplicar ese valor.

El ministerio de Pettovello difundió que incrementó las partidas de dinero para los comedores en un 75%. «La prioridad es que ningún argentino pase hambre», señalaron. Los referentes de las organizaciones, que nunca fueron recibidas por la ministra, sostienen que el dinero no llega a la mayoría de los 10 mil comedores desperdigados en todo el territorio nacional y que la prueba piloto para extender una tarjeta Alimentar a los comedores llegó nada más que a 2 mil establecimientos.

«Frente a la crisis social y económica, el Gobierno decidió irresponsablemente desfinanciar y desabastecer todos los comedores comunitarios. Ignoran que la demanda ha crecido en un 60 por ciento por la crisis», se lamentó el secretario general de la UTEP Alejandro Gramajo, uno de los dirigentes que más escucha el jefe del Evita, Emilio Pérsico.

La mayoría de los comedores depende de los movimientos sociales, pero la Iglesia Católica y los evangelistas también se quejan por lo bajo. El padre Toto De Vedia de La opción por los pobres que vive en la villa 20-21 se hizo presente en la movilización de este miércoles. Javier Milei se entrevistará en 11 días con el papa Francisco en Roma.

Los dirigentes de la UTEP señalan que en las ollas populares el malhumor social y hasta las peleas en las filas son cada vez más habituales. Los referentes de base del Evita y otras organizaciones sostienen que no tienen interlocución con Capital Humano para lo más urgente. El delegado del secretario de Niñez y Familia Pablo de la Torre encargado de atender los pedidos de alimentos de las organizaciones, Omar Alkaddour -que nunca llegó a ser nombrado- pegó un portazo esta semana. «Le sacan la comida de la boca a los pobres para garantizar la fiesta de la casta«, dijo Nicolás Caropresi, secretario general del MTE.

Pettovello, que según el Presidente es la única ministra que puede ampliar el gasto en medio del ajuste, anunció el miércoles un ahorro $25 mil millones para este año.