REDES PARA ENREDAR FUNCIONARIOS

Por Enrique Franco Zaremba

Las Redes Sociales comparten más cantidad de información(verdadera o falsa ) con el avance de la CIENCIA Y TECNOLOGÍA.

Desde las señoras que se juntaban en las veredas de su domicilio, o hasta el RADIO PASILLO de los lugares de trabajo, la información se ha transmitido entre los actuantes.

La libertad de expresión estaba segura por el anonimato de la fuente, y quién originó el comentario informativo permanecía oculto o semi oculto en la mayoría de las ocasiones cuando podía tener consecuencias legales o tal vez físicas.

Hoy la información no tiene límites por las distancias físicas a considerar por el tiempo de entrega y difusión. El espacio y tiempo que solo manejaban Gobiernos, compañías multinacionales o agencias noticiosas, hoy ha logrado una amplia participación y activismo el ciudadano conectado a INTERNET O UN TELÉFONO MÓVIL.

Los Secretos de ESTADO no han perdido protección, las implicancias legales para el funcionario que revele los mismos siguen vigente.

El peligro está así enfocado para las mañas acciones, que dejan al descubierto principalmente a la corrupción estatal y la falta de capacidad intelectual e idoneidad de los funcionarios políticos (y sus variadas mentiras).

Las redes sociales no ponen en peligro, o corroe la DEMOCRACIA. Por el contrario, EL PUEBLO SOBERANO toma conocimiento de LA GESTIÓN ADMINISTRATIVA y la actuación de sus funcionarios.
Evalúa de esa forma con actos reales las capacidades y moral de los funcionarios.

La DEMOCRACIA está verdaderamente en peligro, cuando se compran voluntades y se oprime la educación. Valerse de las necesidades de quienes son carenciados para adoctrinar en lugar de CULTIVAR EL INTELECTO, radica el núcleo Central antidemocrático, y auspicia o consum que el PUEBLO NO PARTICIPE en PARTIDOS POLÍTICOS dónde los únicos que se afianzan como dirigentes son núcleos familiares con capacidades económicas altas.

Llegó la hora de iniciar una verdadera defensa de los DERECHOS CIUDADANOS, enfrentar todo AVASALLAMIENTO de quienes conculcan desde la función estatal, a los efectos de organizar un ESTADO ADMINISTRATIVO en lugar de Gobiernos de facciones que luchan por las Cajas del Erario público.