No me voy a referir a una obra clásica inglesa.
Es una novela demasiado infantil ante la realidad política Argentina.
Aquí ya lamentamos la pérdida de 103.000 fallecidos, muchos de nosotros hemos llorado por ellos. Parece que los funcionarios del Gobierno, y quienes pretenden representar al PUEBLO en esta contienda electoral, no han recorrido los cementerios y los hogares donde sufren las pérdidas.
Luego de una batalla, el General debe recorrer el campo de batalla y los centros sanitarios, en esa imagen podrá evaluar el precio de sus actos ( su triunfo o derrota ).
Posiblemente así, aplicará lo ontológico en su forma de tomar decisiones.
Ante los graves errores y comparaciones fallidas, basadas en irrealidades no sólo de recursos materiales, capacidades tecnológicas y profesionales, estructura social, potencial estatal, etc etc y etc; claramente ni siquiera aplicaron la gnoseología, o si la aplican en otras cuestiones impulsadas como leyes o imposición de nuevas costumbres vemos los tristes resultados en los seres humanos y sus actividades.
El BIEN JURÍDICO SUPREMO ES LA VIDA, ese objeto político debe ser lo prioritario, los actos y actuaciones de GOBIERNO no deben contrariar o descuidar su defensa.
Los recursos hoy se tendrían que dirigir a tal fin; más cuando al ciudadano se lo priva de derechos aduciendo que todas las medidas restrictivas son para cumplir con esa meta. Toda acción o gasto que perjudica a la obtención de los medios para enfrentar un determinado mal, pasa a la contradicción entre lo exigido al SOBERANO (pueblo) y las prioridades impunes del SERVIDOR (gobierno).
Los resultados están a la vista, la ineficiencia ya es incomparable; las barbaridades esgrimidas son monumentales ahí se observa la relación del pensador y las necesidades.
Así vemos que cambiamos hasta el lenguaje para tapar la decadencia; de una sociedad generadora y orientada a formar ciudadanos PROBOS, ¿ tanto pedir que cambiemos llegamos a la obligacion que la PROBES?.
Quienes impulsan la inclusión por medio del lenguaje, tendrían que ser fieles a su pensamiento, llamarse por ejemplo FRENTE de TODES, ¿o son Machirulo?.
¿En los actos desde ahora se reparten CHORIPEN?.
Con respecto a las arcas del Estado, por lo menos ahora no dirán Gasta o Gastó, la sinceridad del GASTÉ estará en boca de las declaraciones de los funcionarios.
En definitiva, lo único tangible y sin discusión filosófica o semántica, en la lucha propia de nuestros ciudadanos que sufre la angustia de HAMLET CON UNA CALAVERA EN LA MANO, tenemos más ciudadanos POBRES y menos políticos PROBES (Ya caduco el PROBO ).
Enrique Franco Zaremba
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