Las razones más superficiales de la caída de Apple son los últimos resultados presentados por la compañía cuyas ganancias del cuarto trimestre excedieron levemente las expectativas del mercado.
Sin embargo, si examinamos el balance con mayor profundidad, vemos una fuerte caída en las ventas del iPhone, con una baja de alrededor de un 20% comparado con el mismo trimestre del año pasado.
Algunos analistas atribuyen este resultado al retraso en el lanzamiento del iPhone 12 debido al Covid-19, que impactó directamente en las ventas en China.
Pero quedarse con esto es ver sólo una pequeña parte de la película.
La realidad es que las acciones de la empresa subieron en los últimos años de una manera totalmente desconectada de los hechos.
Para entender lo que está pasando con Apple, vean el siguiente cuadro:
Lo que vemos arriba es una comparación de algunas métricas de valuación muy utilizadas: el ratio Price to Earnings(precio sobre ganancias) y el ratio Price to Sales(precio sobre ventas).
Y lo que hay que entender es que en un año, Apple casi duplicó su valuación en relación a sus ganancias y ventas. En la jerga se habla simplemente de “expansión de múltiplos”.
Estos números representan el enorme optimismo del mercado en la compañía.
Para que les quede claro: hace un año, por cada dólar que Apple vendía, el mercado estaba dispuesto a pagar u$s 4,10 en el precio de sus acciones. Hoy, por cada dólar que vende Apple, el mercado está pagando u$s 7,6.
En definitiva, el precio de las acciones de Apple subió mucho más rápido que sus ganancias y ventas.
A pesar de que la empresa ha estado diversificando su cartera de productos para aumentar las fuentes de ingresos, el iPhone sigue siendo el producto estrella. Este representa más de un 50% del total de las ventas de Apple.
El siguiente gráfico nos muestra los ingresos por ventas de iPhone en todo el mundo de 2015 a 2020 (el valor de 2020 es anualizado tomando los últimos cuatro trimestres):
El mayor problema de Apple hoy es que está valuada como una empresa de alto crecimiento cuando en verdad, está mostrando claras señales de estancamiento.
Y como si fuera poco, las ventas de iPhone están cayendo.
Para que puedan verlo con claridad: entre 2015 y lo que va de 2020 las ventas del gigante tecnológico crecieron +17,5%. Sin embargo en el mismo periodo (tomando 31-Dic-2015 a 30-Oct-2020) las acciones de Apple subieron +314%.
Una desconexión total entre el precio de sus acciones y lo que muestran sus números contables.
Quizás la innovación disruptiva que podría ser el salvavidas de este producto es la línea de teléfonos con conectividad 5G, cuyo principal beneficio es agilizar la velocidad de navegación y descarga de datos.
Sin embargo, es muy difícil que esto genere un aumento de ventas que justifique los niveles de precios actuales. Y también es difícil considerar a esto como una revolución disruptiva del calibre que significó la aparición de productos como el iPod o el propio iPhone.
En conclusión, es probable que estemos viendo un techo en el precio de las acciones de Apple. Y en términos probabilísticos, hay grandes chances hoy de ver una fuerte caída si la empresa no crea rápidamente un producto nuevo que genere una revolución de ventas.
¿Cuánto podrían caer las acciones de Apple? Esta es la pregunta más difícil de responder. Pero les propongo un ejercicio:
Para que Apple tenga un ratio Price to Earnings de 15, sus acciones tendrían que caer más de un 50%. Este valor representa el promedio histórico que ha tenido el índice S&P 500, y que usualmente tienen empresas maduras y consolidadas.
Si bien no tiene mucho sentido intentar hacer futurología, lo que quiero que entiendan es que las acciones de Apple pueden derrumbarse, y aun así tener una valuación razonable.
Por eso, si piensan que es una buena idea estar comprados hoy en Apple, deberían pensarlo dos veces.
Por último, algo muy importante. Si quieren aprender a invertir mejor, esto los va a ayudar: los invito a que se descarguen una guía con tres consejos 100% prácticos para tomar mejores decisiones de inversión.