
Sídney (Australia), 8 dic. Dos padres neozelandeses que se negaban a que su bebé de cuatro meses recibiera transfusiones de sangre de donantes vacunados contra la covid-19 anunciaron que no apelarán el fallo judicial a favor de que el menor sea sometido «sin más demora» a una cirugía urgente al corazón, dijo este jueves su abogada.
En una sonada batalla judicial que concitó el interés mundial, el juez Ian Gault del tribunal Superior de la ciudad de Auckland dio la víspera luz verde a los médicos para que decidan sobre la transfusión de sangre necesaria durante la intervención quirúrgica en un fallo, que técnicamente podía ser apelado en otra instancia.
El magistrado también determinó en su fallo que la justicia asumía la tutela del bebé entre el miércoles y el 31 de enero de 2023 mientras el menor, quien sufre el estrechamiento de una válvula del corazón, se somete a esta intervención quirúrgica urgente y recibe tratamientos post-operatorios.
Pero, la letrada Sue Grey dijo que «no hay tiempo para apelar debido a que el tribunal dictó su decisión al cierre de la jornada de ayer, y (se trata de) un complejo proceso para presentar un recurso contra la orden», según un mensaje publicado hoy en las redes sociales por el Partido Libertad y Aire Libre de Nueva Zelanda.
Grey también indicó que los padres del bebé quieren pasar un «tiempo tranquilo» con el menor antes de la operación, que se prevé se produzca entre hoy y mañana.
«Hemos concluido que el Gobierno no puede darse el lujo de que algo vaya mal con el bebé W porque el mundo está mirándolo. Es probable que tenga el mejor cuidado, con la sangre más segura», admitió Grey.
Las donaciones de sangre en Nueva Zelanda son gestionadas por NZ Blood, un organismo oficial que durante la recolección no pide a las personas indicar si están vacunados contra la covid-19 y asegura que no existen pruebas de que la sangre de personas vacunadas suponga un riesgo añadido.
Algo a lo que los padres se habían negado, a pesar de reconocer la urgencia de la operación, y habían propuesto su propia lista de donantes de sangre entre personas que no han sido vacunadas contra la covid-19.
El tribunal escuchó el martes la posición de los padres y del departamento de Salud, que solicitó el 28 de noviembre la tutela del bebé al ampararse en la Ley de Cuidado del Menor con el fin de que sea operado con urgencia.
El país oceánico, que aplicó férreas restricciones dentro de sus fronteras para combatir la crisis sanitaria y registra altas tasas de vacunación, cuenta con un numeroso movimiento antivacunas, que entre febrero y marzo de este año llegó a acampar frente al Parlamento hasta que fueron desalojados por la Policía. EFE
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