
Es decir, hoy no tendrán que ir a la escuela todos los estudiantes, sino los que hayan sido previamente contactados por los establecimientos y acepten la propuesta, con protocolo especial para los jardines maternales privados, ya que para escuelas públicas se incluyen a partir del nivel preescolar, primario y secundario. Se trata de la misma actividad que hasta ahora estaban realizando los alumnos de 7º grado de primaria y 5º año de secundaria.
La apertura es obligatoria para los establecimientos escolares, pero no así para los alumnos que, por distintas circunstancia familiares, decidan no concurrir, mientras que las escuelas deberán organizarse de acuerdo con la matrícula, la cantidad de docentes de que disponga y las condiciones edilicias que permitan el desarrollo de las actividades.
Por otra parte, los jardines maternales, con niños de 45 días a dos años, harán encuentros de “estimulación temprana de un nene con un docente más un acompañante”, según anunció Horacio Rodríguez Larreta el viernes, remarcando que se habilitarán “a pedido para gestión privada”.
Además del uso del barbijo, se impone que cada persona que ingresa a la institución se tome la fiebre y utilice alcohol en gel, que se dispondrá a la entrada de los establecimientos.
Por otra parte, el Gobierno porteño indicó que “voluntariamente” tanto el personal docente como el no docente puede acceder a la realización del test para detectar el coronavirus y habrá un número telefónico para hacer consultas en ese sentido.
El otro tema al que se enfrenta la Ciudad es a la resistencia hasta ahora de gremios docentes a recomenzar las actividades presenciales por la posibilidad de un impacto en los casos de contagios de coronavirus.
Ayer, Diego Santilli explicó que “la vuelta a clases” en todos los niveles educativos continuará la modalidad de “revinculación” con la idea de que todos los alumnos tengan la posibilidad de contactarse antes del fin del ciclo lectivo “dos veces mínimo y cuatro máximo” por semana.
“La vuelta a la escuela va a ser para todos los alumnos desde 45 días hasta los adultos, salas de 2, 3, 4 y 5 años, primaria, secundaria y todos adultos que se recibieron”, explicó el vicejefe de Gobierno. Para los jardines, el protocolo indica burbujas de 8 niños y un docente.
“Lo vamos a hacer al aire libre o en lugares abiertos; serán dos veces mínimo 4 veces máximo, pero cada escuela lo va a tener que organizar”, confirmó Santilli y en otro sentido habló de “una especie de ‘Ahora 12’ para que puedan pagar la cuota parroquial los padres” que contrajeron deudas con las escuelas privadas.
“Al sector privado lo ayudamos mucho, el Gobierno de Ciudad tiene una política firme de ayudar a muchas escuelas privadas que tienen cuotas bajas, escuelas de comunidad, escuelas parroquiales, donde la cuota no es de las más elevadas y no está mal en pensar en una especie de Ahora 12 para que los padres puedan pagar la cuota parroquial que tenían”, dijo el funcionario.
En el distrito porteño, según datos del Ministerio de Educación, ya hay abiertas 698 escuelas de gestión estatal y hoy se sumarían otras 39.
El anuncio del viernes generó confusiones con respecto a las actividades escolares que se pensó se trataría de una reapertura del ciclo lectivo. Sin embargo, apunta al contacto social que perdieron los alumnos durante el aislamiento preventivo y obligatorio y a cerrar el ciclo lectivo con presencia de los escolares en los establecimientos.